La medicina hiperbárica en Sevilla cada vez está más solicitada. La medicina hiperbárica, o también conocida como terapia de oxigenación hiperbárica (TOHB), consiste en la administración de oxígeno en alta concentración y el aumento de la presión atmosférica con fines curativos. Es un tratamiento totalmente eficiente y con evidencia científica demostrada para la aceleración de los procesos de curación. Existen varios tipos de cámaras hiperbáricas que llegan a distintas presiones de aire puro concentrado. A continuación, te explicamos los tipos de presiones que se pueden conseguir y, te recomendamos la mejor solución pensada para ti.
¿En qué consiste la medicina hiperbárica u oxigenoterapia hiperbárica?
Quizás, has escuchado alguna vez los beneficios de respirar oxígeno puro en un ambiente controlado. Incluso, puede que hayas leído que cerebritis como Madonna o Britney tienen una en su propia casa. Pues hoy, queremos despejar tus dudas, ya que la medicina hiperbárica está en Sevilla, no es un tratamiento inalcanzable. Cuando comenzamos un tratamiento de medicina hiperbárica, en el cuerpo se produce un fenómeno llamado hiperoxia (exceso de oxígeno en el organismo). Durante la hiperoxia, experimentamos una mayor oxigenación de los tejidos vivos. En estas condiciones, se garantiza, también, la oxigenación de tejidos isquémicos y lesionados. La administración de oxígeno en alta concentración con la medicina hiperbárica aporta una gran multitud de beneficios a los pacientes. Estos beneficios dependerán de:- Concentración de Oxígeno, la cual alcanzará niveles cercanos a 100%.
- Presión de la cámara hiperbárica: (alta, media o baja). Sobre esto nos centraremos en el siguiente punto a desarrollar.
- Duración de la sesión: generalmente en media presión es entre 60 a 90 minutos, con 3 minutos de compresión y 2 de descompresión, obteniendo 55 – 85 minutos de tratamiento efectivo por sesión, respectivamente.
- Número de sesiones: esto lo indicará el equipo médico, donde contamos con un especialista en medicina hiperbárica en Sevilla, y variará de acuerdo a la patología o lesión a tratar o el objetivo a alcanzar.
- Frecuencia de las sesiones: también indicada por el personal especializado en medicina hiperbárica y siempre, teniendo en cuenta la condición del paciente.
Medicina hiperbárica en Sevilla: cámara hiperbárica de media presión
Como hemos comentado en el anterior punto, existen cámaras hiperbáricas con diferente presión. La presión que se genera en la cámara hiperbárica es, en otras palabras, la fuerza que consigue alcanzar el aire dentro de la cámara y, por lo tanto, somete al cuerpo a condiciones diferentes a la normal. Es como si nos sumergiéramos en el agua a varios metros de profundidad. Es muy importante que, el paciente, antes de realizar un tratamiento de medicina hiperbárica, pregunte al equipo médico sobre la presión de la cámara hiperbárica, ya que no todos los pacientes conseguirán los mismos beneficios. En general, encontramos cámaras hiperbáricas con tres tipos de presión:- Alta: está recomendada para uso hospitalario en pacientes graves y en entrenamientos que requieren de una gran preparación física como en el caso del ejército, guardia civil e incluso a la preparación para equipos de buzo. La presión que se consigue en una cámara hiperbárica de alta presión no está recomendada para cualquier tipo de paciente, además de conllevar más riesgos en su utilización.
- Baja: es una presión muy leve. La más utilizada por fisioterapeutas o por terapeutas para afecciones simples. No requiere de un conocimiento exhaustivo ni especializado en medicina hiperbárica, ya que la concentración de oxígeno es menor. Para conseguir resultados notables, será necesario un mayor número de sesiones.
- Media: es la presión más recomendada para cualquier patología, afección o lesión. Es poco invasiva y respetuosa con el organismo. Mucho más eficaz que la cámara hiperbárica de baja presión, pero sin llevar a suponer un riesgo añadido a los pacientes, como puede ocurrir en las de alta presión.
- Poseen la misma eficiencia terapéutica que las de alta presión, sin llegar a suponer un riesgo.
- Son 100% seguras. Sin posibilidad alguna de generar un evento o accidente, ni por fallo, ni por mal uso o error humano.
- Son cómodas y confortables para los pacientes.